Como soy bien cliché. me puse un nuevo tatuaje de Evil Dead, un trabajo excelente en manos del buen Manuel Huizar aca en la Paz BCS.
sábado, enero 21, 2006
miércoles, enero 18, 2006
martes, enero 17, 2006
ALE Y YO
Alejandra era una mujer perfecta, nada la lastimaba, a pesar de vivir mucho tiempo con ilusiones basadas en una vida reprimida. Era de ese tipo de mujeres que creía que el primer hombre que se las tirara, con ese se iban a casar, a tener hijos, a soportar las groserías y abusos de unos suegros oportunistas y asalariados, que además de eso, iban a mandar bonos para todos los niños que se mueren de hambre en África. Pues si, en efecto, Alejandra era una mujer que adoraba, pese a las tonterías que le tuve que soportar por sus celos infundados. En cierta ocasión recuerdo que yo platicaba con una vieja amiga que hacia años que no veia, y Alejandra, al ver ese encuentro tuvo el valor y descaro de llegar a dejarme en ridículo enfrente de mi amiga, comportándose como arpía posesiva, y yo tan solo con mi única cara de vergüenza que se poner en ese tipo de casos. Mas tarde, dilate tres horas, en reconciliarme con ella, terminando ese día en buenos términos. Quizás me tenga que remontar mas en el pasado y recordar el momento mas intenso para los dos, el cual fue el día en que ella perdiera su tan prestigiada virginidad. Recuerdo que ese día yo me moría de ganas por tirarme ese bello cuerpo voluptuoso, con el que cuando estudiábamos en la misma escuela, me provocaba deseos que desenfundaba como bestia durante el acto de mis masturbaciones. Pues si, era Alejandra la que yacía de culito en ese cuarto de Hotel de $85 pesos, y como dejar pasar aquellos pezones rosados con los cuales había soñado aunque sea verlos por un segundo. Lo demás creo que sucedió como todas las veces que te tiras una virgen, mucho forcejeo, gritos de dolor y placer, palabras sobrantes, y el concluido llanto y la conjunción con la sangre empañada en el colchón barato. Quien diría que ese momento que marco la vida de Alejandra, desencadenara una serie de desordenes que en estos días, siguen correteándome como fantasmas vengativos. Con el tiempo, me di cuenta que Alejandra tomaba una serie de actitudes que me tenían sorprendido, ya no quiera casarse ni tener hijos, ni siquiera vivir con sus padres, era de esas chicas que dejo la carrera y se metió a trabajar en un Bar, con la esperanza de provocar un coraje a sus padres, y demostrarles de que estaba hecha esta mujer. Ya no era esa chica buena que gritaba cuando me la tiraba los fines de semana en aquella playa solitaria. Yo por mi parte, perdí interés en la relación con Alex, como últimamente la llamaba. Es cuando decidí sacar mis aires de macho que ya tenía guardados desde hacia mucho en un ropero, y dispuse divertirme un poco. Fue una temporada de tres meses en que empecé a conocer muchas amigas con las cuales disfrutaba los placeres mundanos que el buen sexo ofrece sin garantía. Sin duda lo que mas extrañaba es que me chuparan el miembro y yo poder correrme en la cara de alguna persona, pues desde que empecé a salir con Alejandra, todo esto había quedado como solo una fantasía que reventaba al momento de ducharme.
Hace dos días, conocí a unas damas que trabajaban en fiestas privadas, al que fui invitado cordialmente. Además de que ofrecían de esos nuevos shows, en donde muchas veces no sabes a quien te coges, o te vendan los ojos, o se ponen a realizar actos fetichistas que solo en películas te los puedes imaginar. Al llegar al misterioso evento, me percate de que había todo tipo de gente, casi todos dejando en incógnito su identidad, sirviéndose de mascaras y trajes sadomasoquistas, para mi era una novedad todo esto, y me sentí cómodo por presenciar la experiencia. Todo era un tanto monótono, llegó un momento que comencé a enfadarme, cuando de repente, aparecería la estrella de la Noche, la cual realizó el acto cumbre del anoche, dejándose follar por diez hombres. Su nombre artístico era Chantal, pero mi sorpresa seria que su verdadero nombre era Alejandra, y que era mi chica. Yo salí corriendo de la fiesta de degenerados, y anduve vagando por horas alrededor de las calles solitarias en busca de respuestas. Mi conclusión después de todo esto tan solo era que Alejandra es una mujer perfecta, tan perfecta e inteligente que nunca me hubiera imaginado lo que ocultaba su vida, a ciencia cierta, posiblemente lo que quedó manchado en la cama del Hotel aquel glorioso día, fue salsa catsup, como sucedió?, no se, en eso consiste esta vida, en trampas y preguntas que no se contestan a si mismas.
Hace dos días, conocí a unas damas que trabajaban en fiestas privadas, al que fui invitado cordialmente. Además de que ofrecían de esos nuevos shows, en donde muchas veces no sabes a quien te coges, o te vendan los ojos, o se ponen a realizar actos fetichistas que solo en películas te los puedes imaginar. Al llegar al misterioso evento, me percate de que había todo tipo de gente, casi todos dejando en incógnito su identidad, sirviéndose de mascaras y trajes sadomasoquistas, para mi era una novedad todo esto, y me sentí cómodo por presenciar la experiencia. Todo era un tanto monótono, llegó un momento que comencé a enfadarme, cuando de repente, aparecería la estrella de la Noche, la cual realizó el acto cumbre del anoche, dejándose follar por diez hombres. Su nombre artístico era Chantal, pero mi sorpresa seria que su verdadero nombre era Alejandra, y que era mi chica. Yo salí corriendo de la fiesta de degenerados, y anduve vagando por horas alrededor de las calles solitarias en busca de respuestas. Mi conclusión después de todo esto tan solo era que Alejandra es una mujer perfecta, tan perfecta e inteligente que nunca me hubiera imaginado lo que ocultaba su vida, a ciencia cierta, posiblemente lo que quedó manchado en la cama del Hotel aquel glorioso día, fue salsa catsup, como sucedió?, no se, en eso consiste esta vida, en trampas y preguntas que no se contestan a si mismas.
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